¡Escribe tu historia con el British Council!
Muchas veces queremos intentar actividades nuevas, pero nos cohibimos por temor al qué dirán. Esta es una preocupación que solemos tener al aprender algo, sobre todo un idioma. Para que superes el miedo al inglés, te compartimos la historia de Débora y Daniela, dos estudiantes del British Council que nos dan sus mejores consejos.
Superar el miedo al inglés: la experiencia de Débora y Daniela
¿Te ha pasado que quieres inscribirte en una clase de baile, instrumentos musicales, manualidades o idiomas, pero te da pena que los demás alumnos sean más avanzados que tú?
Esperamos hacer todo perfecto de la noche a la mañana y deseamos tanto llegar a la meta que olvidamos que el proceso toma tiempo. Como dicen por ahí, la práctica hace al maestro. Debemos ser pacientes con nosotros mismos y recordar que todos empezamos desde ceros en algún punto.
Además, la verdad es que cada uno está tan enfocado en su proceso que no se fija en si lo haces bien o mal. Así que la mayoría de los escenarios en los que piensas que te juzgan o se burlan de ti solo existen en tu mente, que te juega una mala pasada.
Por ejemplo, Débora Enriquez, una estudiante de los cursos para adultos, dice que “el miedo al inglés lo superé a través de las clases, porque en el British Council es muy diferente la dinámica, la pedagogía es distinta. Los profesores te dan muchísima confianza, no importa que te equivoques, te repiten y te ayudan, te empujan para que tú lo puedas hablar correctamente”.
Es clave saber que estás en un espacio seguro, en el que puedes socializar tus dudas con los profesores y compañeros. Gracias a esa confianza, su relación con el inglés ahora es diferente: “le he tomado aprecio a la lengua como tal. Me siento más tranquila. Ya no tengo tanto miedo de hablarlo, porque al principio da vergüenza, pero la verdad es que me gusta mucho. Es más interesante y ya es mi segundo idioma, no es algo que repelo”.
Por su parte, Daniela Castellanos ha aprovechado más las clases en el ámbito profesional desde que dejó de ponerle freno a su potencial con ayuda de su maestro: “el año pasado estaba estudiando una maestría y me daban la oportunidad de tomar diferentes materias en universidades reconocidas, como Oxford, y otras en Canadá y Turquía. Yo tenía miedo en ese momento. Le pregunté a mi profesor si él creía que yo podía tomarlas y me dijo ‘no lo dudes’. Las tomé y lo logré”.